miércoles, 29 de mayo de 2013

Exclusivamente para ti

A todos nos gusta sentirnos especiales, que piensen en nosotros. ¿Hay algo más especial que un detalle sólo para nuestros ojos?

Cuentan los expertos que el futuro del lujo está en la personalización. Las grandes firmas del sector se afanan en conseguir que sus clientes se sientan únicos en cada momento: cuando sueñan con sus productos, cuando deciden visitar la tienda, cuando reciben su artículo y cuando disfrutan de su adquisición y lo cuidan como un tesoro.

Louis Vuitton, por ejemplo, ha vuelto a los orígenes y permite personalizar sus bolsos con la misma tipografía con la que marcaba sus baúles, hechos por encargo, a finales del siglo XIX. En aquella ocasión lo hacían para identificar los equipajes en viajes largos. Ahora, lo ofrecen, para que no nos perdamos en una sociedad en la que la uniformidad es la tónica: todos vestimos iguales, vamos a los mismos sitios y nos comportamos de la misma forma.






En Castlebaby, queremos crear, especialmente, para nuestros clientes, para nuestros seguidores. Por eso, decidimos personalizar nuestros trajes de comunión y cristianar con un detalle que identificara para quien cosimos ese diseño, a quien le dedicamos cada puntada. No sabíamos cómo hacerlo hasta que, en Europa Europa, un anticuario donde pasar horas y horas en Madrid (C/ Don Ramón de la Cruz, 48), encontramos lo que buscábamos: unos pequeños medallones con iniciales bordadas delicadamente.

Además, siempre hemos deseado que nuestros diseños perduren en el tiempo, que traspasen esa línea imaginaria entre lo efímero y lo eterno. Ese pequeño medallón, escondido en un lugar de la prenda, también, es una marca de su atemporalidad.


Teresa eligió el diseño Inés para hacer su Primera Comunión. Lo confeccionamos exclusivamente para ella, con alguna modificación sobre el diseño original y, como sorpresa, en la espalda, una pequeña T eterna. Cuando pasen los años, y alguien descubra esa T, se podrá imaginar cómo fue su vida, ese día de fiesta, y, viajar, a nuestros días. Ese pequeño detalle será un vehículo para trasladarse en el tiempo, para contar historias y alimentar la leyenda.




jueves, 23 de mayo de 2013

Bautizo en Downton Abbey


Si nos leéis habitualmente, ya sabréis que, en Castlebaby, nos encanta inspirarnos en series y fotografías que recreen cómo se vestía a finales del siglo XIX y principios del XX. De esa inspiración proviene el aire vintage de todas nuestras creaciones.

Una de nuestras series favoritas es Downton Abbey. La pena es que en el reparto aparecen pocos niños así que sólo tomamos ideas puntuales que aplicamos a nuestros diseños.

Sin embargo, en la última temporada, tuvimos la ocasión de asistir al bautizo de Baby Sybil. Aunque cuesta ver los detalles del faldón de cristianar, parece ser que es de batista muy fina con encajes valenciennes y la capota, no es una capota, sino un gorro redondo con un rosetón con bordados a mano y valenciennes en la parte trasera.






Aunque pueda parecer extraño, a principios del siglo XX no se utilizaban capotas sino estos gorros que son piezas únicas, imposibles de encontrar hoy en día. Con la idea de inspirarnos para alguna creación nuestra, hemos buscado por anticuarios de toda España y parte del extranjero uno de ellos y nos han contado por qué no existen ya. Cuando estos diseños pasaron de moda, las familias que utilizan este tipo de trajes de cristianar para bautizar a sus miembros de generación en generación, arreglaron estos gorros, cortando la parte de atrás, cosiéndolos y transformándolos en capotas.



Antes de saber esa historia, mi hija, en el año 2010, llevó un faldón de ese tipo con el gorro original el día de su bautizo. Es el traje de cristianar con el que han recibido sus primer sacramento gran parte de los miembros de su familia paterna desde hace varias generaciones. Es una joya sentimental y única. 




Muchas veces no nos damos cuenta del valor que el tiempo puede dar a las cosas que guardamos y cuidamos con todo nuestro cariño.

martes, 14 de mayo de 2013

Alicia para arras


Como inspiración de nuestro vestido de comunión Carmen, nace el diseño de ceremonia Alicia. Lino italiano, encaje de bolillo en mangas y cintura y un corte que sienta como un guante a las más pequeñas. El  fajín está realizado a base de bolillos cosidos cuidadosamente a mano.

Alicia es el nombre de una niña que vivía en el País de las Maravillas, como merecen vivir nuestras niñas… Alicia se llama la protagonista de Gran Hotel, una serie de TV con un vestuario impecable en el que nos gusta inspirarnos. Tuvimos la suerte de conocer a Helena Sanchís, la artífice de elegir esas obras de arte, en Something Old y sorprende el trabajo tan minucioso que hay detrás de cada modelo. No sólo es televisión, es una recreación perfecta de la Belle Epoque española.

Podéis elegir el tono que más os guste: blanco, blanco roto, tostado, arena… y combinar el traje de arras de niñas con el de niño jugando con los contrastes. El resultado será un cortejo digno de ser recordado…

Y, aunque lo bello, no tiene que ser funcional, con ser bello basta, con el vestido Alicia, las niñas podrán jugar, correr y disfrutar de la fiesta, porque, además de bonito, es cómodo.

Gracias a Bodas y Bebés por estas imágenes…